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Se presentó esta semana: El 100.

  Extraordinario. Imperdible.

Titirilata y Sal a Remolinos: hasta otro año!

D.Click en el Pabellón

Titirilata muy variado el de este año. 

D.Click reunió a público de todas las edades en el Pabellón. Gustó mucho su montaje. Se llaman Ana Castri y Hugo Gauthier, dos grandes artistas.

Soledad  Jiménez en Enlatamus

Los títeres de Luis Felipe, las marionetas de Helena Millán y los sencillos elementos de Soledad Jiménez nos depararon instantes de emoción y poesía en la Lata.

Helena Millán. Foto: T.A.Beroitz

Ya hablamos en su día del clima ideal que tuvimos la primera noche, mientras oíamos a Cira y a Sweet Lorraine. Y así  siguieron, acogedoras, qué más pedir. Muy bien el sonido y las luces, como se demostró  cuando el festival se fue a un el territorio más multitudinario.

Semilla Negra en la Plaza de España. Foto: T.A.Beroitz

Pues menuda la que se montó a la puerta del Ayuntamiento con los de Semilla Negra. Y qué bien plantados los tíos! 

De vuelta a nuestra plaza para oír la música de Geberovich, guitarra y voz, y Klainer, piano. Su último disco se llama Atardeceres y allí florece la poesía de Gloria Geverovich hecha canción. Es una letrista extraordinaria.

Rosarito nos trajo a uno de los colaboradores pioneros de Sal a Remolinos: Roberto Artigas, el Gran Bob, de Casetas, que hacía unos días había tocado en el off del festival remolinero con el trío ribereño Los 3 Norteamericanos.
Por eso había emoción en las gradas y en el palco para ver cómo lo recibía la afición, pues unos decían que actuar fuera del festival era contraprogramar, y otros que era rebajarse. Un ciudadano, cercano a fuentes municipales, aseguraba que esa actuación de Los 3 Norteamericanos al margen de Sal a Remolinos 2015 se habría fraguado solo para evitar ser contratados en el festival. 
En fin, una no entendía muy bien el porqué de la actuación y la no actuación.
Vino Artigas con el bajo eléctrico. Sorpresa: el Gran Bob es el bajista de Rosarito. Y la afición lo recibió con grandes aplausos porque se entendió que el cometido artístico actual no era homologable al que desempeña en Los 3 Norteamericanos. 
Bueno, el jefe de Rosarito, conocido como Rubén Chico Raro, se llama Rubén Díaz Fernández. Con ellos, Carlos Villar "Nebraska", al acordeón y Joaquín de Carpi, percutiendo.

Rosarito en la prueba de sonido

Guanaroca es un cuarteto de cámara singular. Tres cuerdas y un viento. Qué contrapuntos más maravillosos! A veces me recordaba la melodiosidad de Bocherini. No tengo ni idea de lo que he dicho, pero a mí Bocherini me gusta mucho y el Cuarteto Guanaroca, siendo otra cosa, también. Son cuatro mujeres: Arelys Espinosa, guitarra; Susana Ratón, flauta travesera; Dolores Miravete, violonchelo; Elena Prieto, violín.
Tocaron piezas de Arelys Espinosa, compositora de larga trayectoria y autora también de versiones que cautivaron al público, especialmente El día que me quieras.

El último día se trasladó el festival out of mind a Remolinos. Y nos trajo poesía con Las hermanas del hambre. Dos poetisas que dicen sus poemas. Un paraguas sin lona y los poemas que se ensamblan en su esqueleto. Una tormenta de fondo: Charo de la Varga y Elisa Berna. 

Las hermanas del hambre. Foto: T.A.Beroitz

Lucio Cruces proyectó videocreaciones realizadas sobre trabajos de Blasco Valtueña, o de Sergio Muro. Y Fausto Grossi cocinó hortalizas en la Lata hasta que lluvia despidió a la minoritaria muchedumbre.